Mujeres que quieran abortar deberán escuchar los latidos del bebé. Hungría

Las mujeres que deseen someterse a una interrupción del embarazo en Hungría, deberán presentar un documento que certifique que han recibido información sobre los signos vitales del feto.

Es decir, escuchar los latidos del corazón del feto, antes del procedimiento médico.

Dicha medida fue publicada la noche del lunes en un decreto en la Gaceta Oficial de Hungría firmada por el ministro del Interior, Sandor Pinter.

Mientras que Judith Foldi Raczne, miembro de la Coalición opositora Democrática, acuso a Pinter de actuar “inspirado por la extrema derecha, así como, condenó que las decisiones fueron decretadas sin ningún tipo de consulta preliminar.

Sin embargo, la actual ley, que entró en vigor en 1992, determina que entre la semana 12 y 24 de gestación, la mujer puede optar libremente por un aborto, sin requisitos más que su propia decisión. Y solo en casos excepcionales de alto riesgo para la madre o el feto, se puede realizar la interrupción más allá de las 24 semanas.

No obstante, desde el retorno al poder en 2010 del primer ministro Viktor Orban, junto a que ostenta una abrumadora mayoría en el Parlamento, se han reforzado las medidas de control de natalidad.

La presidenta Katalin Novák, quien llegó al poder en mayo y es cercana a Orban, prometió apoyar a quienes “protegen la vida desde la gestación” en su campaña electoral.

Vanguardia

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