Tres semanas para la elección y doce gubernaturas están en juego. Una buena tajada del pastel electoral en vista de la elección federal de 2018, está en disputa y podría cantear desde ahora el equilibrio por la presidencia de la república. 5 de junio de 2016 se registrarán elecciones en 13 estados del país, además, en la Ciudad de México, donde se realizarán comicios para elegir a los 60 diputados que integrarán la Asamblea Constituyente que será la encargada de formar la nueva constitución para la capital del país (será el estado 32 y se llamará: “Ciudad de México).
12 gubernaturas, 388 diputaciones locales (se renovará el Congreso en 12 estados), 965 Ayuntamientos (se elegirán presidentes municipales y regidores). Estos procesos abarcan el 35% del padrón electoral, 28 millones de votantes. El proceso constitucionalista de la ciudad de México, suma un 9% adicional, para quedar en 35.2 millones. No hay registro de una elección con este paquete de renovación, y de electores. El padrón electoral nacional registra a 80 millones de potenciales votantes.
Desde el tricolor no todo está bien. La crisis en Tamaulipas por los supuestos candidatos a presidentes municipales, “enredados con el crimen”, da a García Cabeza de Vaca (del PAN) una ventaja que pasa de ser empate, a virtual triunfo albiazul (hay desbandada hacía el abanderado panista). Aguascalientes y Durango viven el episodio de una mala decisión tricolor, malos candidatos y malas campañas (uno del centro y otro del gobernador). Quintana Roo y Chihuahua navegan entre el sopechosismo de que los gobernadores la juegan en contra de su partido y candidatos. Quintana Roo vive además la crisis de la renuncia partidaria del aspirante del PRI que no fue seleccionado (es medio hermano de un ex gobernador, quien es actualmente secretario en el gabinete federal).
Zacatecas vive una crisis por un, reciente y extraño avionazo en que muere un aspirante del PRD a la gubernatura y luego la cancelación del registro del señor Monreal, candidato de Morena. Tlaxcala y Puebla parecen definirse más claro para Morena y para el PAN, respectivamente. Hidalgo, Oaxaca y Sinaloa dicen tener ventaja tricolor, pero tampoco los márgenes son suficientes para cantar victoria. En Sinaloa hay un ex secretario del gabinete estatal corriendo como independiente. Finalmente, Veracruz, está clara pero solo contra el PRI: Ahí ganará “la unanimidad contra Duarte”. Como estrategia política, enviaron a un panista conocido como candidato independiente (la idea no es que gane sino restar votos al ex compañero).
La Ruta de la Deuda”… muy pronto.
COLUMNAS de MÉXICO… “Con ética y honestidad: Otra historia se escribe. Otro México se cuenta.