Magistrado propone que los partidos postulen a 4 mujeres a las gubernaturas y no a 5. TEPJF

Deprecated: explode(): Passing null to parameter #2 ($string) of type string is deprecated in /var/web/site/public_html/wp-content/plugins/shortcode-cleaner-lite/includes/Module/Cleaner.php on line 43 Deprecated: explode(): Passing null to parameter #2 ($string) of type string is deprecated in /var/web/site/public_html/wp-content/plugins/shortcode-cleaner-lite/includes/Module/Cleaner.php on line 270

El magistrado Felipe de la Mata ha propuesto al Tribunal Electoral (TEPJF) un proyecto de sentencia en el que se ordena a los partidos políticos postular obligatoriamente al menos a cuatro mujeres en las nueve gubernaturas que estarán en juego en 2024.

El proyecto supone un ligero pero significativo cambio al acuerdo sobre paridad de género aprobado antes por el Instituto Nacional Electoral (INE), en el que se ordenó llanamente a los partidos postular al menos a cinco mujeres a los Ejecutivos estatales. El acuerdo del INE fue impugnado por Movimiento Ciudadano, y el recurso fue revisado por De la Mata.

Los nueve Estados con elección de gubernaturas en 2024 son Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán. El proyecto de De la Mata razona que, de todos ellos, Yucatán ya tiene legislación a nivel local que reconoce y regula la paridad de género para su Ejecutivo, por lo que, sostiene, no debe ser objeto de vinculación u ordenanza alguna de parte del TEPJF, sino que “se regirá por las leyes locales aplicables”. En ese sentido, solo en los restantes ocho Estados los partidos deben cumplir con el criterio de paridad de género, con la postulación de al menos cuatro mujeres. Aunque el proyecto señala que la cifra es “un piso y no un techo”, y que “los partidos son libres de postular más mujeres”, la resolución no obliga a que lo hagan. Podría darse un escenario en el que postulen a un hombre en Yucatán y queden en total cinco abanderados hombres y cuatro mujeres, sin que eso sea incumplir la sentencia del Tribunal Electoral.

La propuesta de sentencia puede ser votada esta misma semana. Será el primer asunto relevante que votará un pleno del TEPJF incompleto, tras la conclusión del cargo de dos de los siete magistrados. Está por verse el nuevo acomodo de fuerzas al interior del máximo órgano electoral. De aprobarse, la sentencia daría aire a los partidos políticos de ambos bloques en disputa, el oficialista y el opositor, que están en medio de arduas negociaciones con sus aspirantes en los Estados, sobre todo los hombres, que han llevado las presiones al extremo y han amagado con rupturas internas.

Conforme el proyecto de sentencia, los partidos deberán indicar a los Institutos Electorales locales cuáles serán las cuatro gubernaturas en las que propondrán candidatas mujeres. En los Estados en los que ya iniciaron las precampañas, como Ciudad de México, Jalisco y Yucatán (allí comenzaron el pasado 5 de noviembre), los partidos tendrán que informar de su decisión en lo inmediato, mientras que en los restantes Estados deberán hacerlo un día antes del inicio de las precampañas.

El documento establece que las formaciones políticas serán libres de definir, conforme a su normativa interna, qué criterios seguirán para cumplir con la paridad y decidir en qué Estados colocarán a mujeres candidatas.

“Corresponde a los partidos políticos, en lo individual, por coalición o candidatura común, definir, conforme a su normativa interna sobre paridad sustantiva y conforme a sus criterios de competitividad, en cuáles de las ocho entidades federativas postularán cuatro candidatas y cuatro candidatos. Ello, como resultado de que se vinculó a los partidos a establecer mecanismos normativos internos tendentes a garantizar la paridad sustantiva con un enfoque de competitividad para las candidaturas a los poderes ejecutivos de las entidades federativas, y al INE a su supervisión”, dice el proyecto. El INE, previamente, había establecido que los partidos no debían postular a mujeres exclusivamente en los Estados donde tienen pocas probabilidades de triunfo, una práctica a la que solían recurrir las formaciones para cumplir con la paridad sin arriesgarse políticamente.

El País
Compartir