Coahuila sigue derramando lágrimas

Sin duda Coahuila llora desde hace 13 años que nos cayó la maldición con los Moreira’s, desde que llegó el primero y se expandieron como una plaga apocalíptica esta familia, muy pronto se convirtieron en las sanguijuelas del presupuesto y todos sin excepción, porque hasta la madre de ellos le entro a la desfachatez del robo, se hicieron millonarios gracias al primer poder que tomó Humberto, herencia del anterior gobernador también de estirpe priista: Enrique Martínez y Martínez. Desde entonces Coahuila llora.

El martes 19 de febrero vino de visita a Coahuila nuestro presidente Lic., Andrés Manuel López Obrador, a rendir un homenaje a nuestros soldados. Y fue en su recinto, en el Batallón 69 de Infantería, ubicado en la capital de este Estado. Acompañado de su esposa, sin hacer mucho ruido nadie sabía bien su itinerario. Llego, a su estilo, con el factor sorpresa, se creía llegaría a visitar el Hospital General así que desde días antes, se pusieron a resanarlo y pintarlo por fuera para que no se notara tanto el deterioro gracias al saqueo que ha tenido desde que se inauguró y con eso que le depositaban al gobierno Estatal para la manutención de este y surtiera medicamentos más sus necesidades de nóminas, enseres, etc.

Pero como todo presupuesto caía en manos de las trituradoras de funcionarios públicos de alto rango, entiéndase gobernador, está en pésimas condiciones. No visitó nuestro Presidente el hospital, pero la alarma de su vista al menos dejó algo bueno, que se pintara y resanara después de muchos años sin tocar las paredes las caricias de una brocha con pintura.

Arribaron a la ciudad de Ramos Arizpe, Coahuila nuestro Presidente y su esposa, a las 2.40 pm, de ahí se trasladó al otro extremo de la ciudad para llegar a Saltillo, a la salida a Zacatecas donde se encuentra el Batallón de Infantería 69. Desde que pisó suelo coahuilense lo recibieron en el aeropuerto un grupo de maestros jubilados y pensionados, de sección 38 del SNTE con una petición por escrito redactando el viacrucis que padecen, sus penas que los aqueja desde hace años, digamos desde la maldición de los Moreira’s, sobre todo el último gobernador Rubén. Les saquearon $2,000 millones de pesos del Fondo de sus Pensiones, sus clínicas tienen un total desabasto de medicamentos, desaparecieron los fondos de ahorro entre este ex gobernador Rubén junto a otro de sus hermanos, Carlos Ariel, y su compinche el líder actual Xicoténcatl de la Cruz.

Por eso le sacaron la vuelta tanto el gobernador del Estado Ingeniero Miguel Ángel Riquelme Solís, así como el alcalde de ese municipio de Ramos Arizpe, José María Morales Padilla, donde está situado el aeropuerto ni qué decir del alcalde de Saltillo, sabían que las quejas lloverían de a montón y más que este gobernador es de los peores calificados de las 32 entidades más la Ciudad de México.
Posteriormente, cuando llegó al 69 Batallón, fue lo mismo, gente humilde de varios ejidos de diferentes municipios del Estado, entre lágrimas lo esperaban llenos de esperanza, personas con oficios de sus peticiones ya que no encuentran eco en lo Estatal menos en lo municipal, muchas personas que han sido despojados de sus tierras por estos pillos, porque la otra desgracia de Coahuila es que en el subsuelo hay gas Shale y carbón mineral, ¡qué casualidad! Son justo, los campesinos que los han despojado de sus tierras por empresas o por presta nombres, así de manera miserable.

Las protestas también fueron por el retiro del basurero de desechos tóxicos en General Cepeda, Coahuila, construido a escasos 5 kilómetros de varios ejidos, entre ellos Noria de la Sabina, donde ya han teñido derramamientos de estos desechos tóxicos. Los animales les están mal pariendo, porque el subsuelo está en franco envenenamiento, cuentan los campesinos que la peste a veces es insoportable,. Es tro negocio del ex gobernador Rubén Moreira, ya sabemos los millones que deja esto, no conforme con este basurero hay otro en una población relativamente cercana Arteaga, Coahuila, ósea que a Coahuila ya lo tomaron como su tiradero.

A base de engaños a los pobladores, que hasta han sido golpeados por protestar no importando que sea mujeres acompañadas con sus niños, la esperanza es el presidente que cancele este confinamiento de desechos peligrosos como lo es el Cimari.

Mujeres y hombres que han sido despojados de sus casas de INFONAVIT las han pagado 15 años y nunca vieron la luz pero de repente fueron desalojados hoy están en la calle.

También gracias a estos 13 años de extracción priista, la corrupción y fraudes en el INFONAVIT es cuantiosa y abarca casi en los 38 municipios del Estado, donde están involucrados notarios públicos, jueces y magistrados, todos bajo el amparo de la impunidad.

Familiares de los desaparecidos que llevan más de una década, esperando saber de ellos, fue cuando el ex gobernador Humberto Moreira le dejó las puertas abiertas al crimen organizado, los de la última letra; así que se apoderaron del territorio coahuilense a lo largo ancho. Muchos desaparecidos que sus madres y familia claman respuesta, entre lágrimas no olvidan, aún lloran a sus desaparecidos, aquí es un comentario ocultado por las autoridades, lágrimas de piedad rodaron ante la presencia de nuestro Presidente.

Abusos en la CONAGUA, en la Comisión de Electricidad, despojos, desaparecidos como los más de 300 en el pueblo de Allende, Coahuila a complacencia de estos hermanos, pobreza, robos a los maestros jubilados, pensiones que nunca pagó el gobierno Estatal a personas discapacitadas por accidente.

Sin duda Coahuila sigue llorando desde hace 13 años y hasta hoy no se ha visto ninguna respuesta, esperemos que muy pronto nos haga ver la luz este nuevo gobierno federal, tan lastimado por los Moreira’s.

Y termino diciendo : ya chole con lo mismo de los mismos.

Rosa Ofelia Garza de la Peña
Yo opino ¿ y tú ?

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